Hay tarta más deliciosa en el mundo que la New York Cheese Cake? El pastel de queso es un clásico en sus distintas variedades, se puede hacer con o sin horno y el resultado es totalmente diferente, aunque los ingredientes sean similares.
Yo hoy he preparado la New York Cheese Cake de reciclaje, vease, esto es lo que tengo en la nevera, un par de yogures, queso de untar...un montón de huevos.. a ver que puedo preparar... ah mira! una tarta de queso.. pues allá que vamos.. y a pesar del calor infernal que hace en casa en agosto, voy a tener la osadía de encender el horno (y el ventilador de la cocina) y aprovecho que esta tarde estoy de Rodríguez para preparar esta delicia. Os invito a todos a probarla!!
Para la masa:
200 gr. de galletas tipo María
100 gr de mantequilla
1 cucharadas de azúcar
1 cucharadita de canela (opcional)
Para el relleno:
200 gr. queso untar tipo Philadelphia (1 tarrina)
500 gr queso batido o queso Quark (1 bote grande)
1 yogur natural
4 huevos
1 cucharada de extracto de vainilla
2 cucharadas de zumo de limón
2 cucharaditas ralladura limón
2 cucharaditas ralladura naranja
200 gr azúcar
3 cucharadas de harina tamizada
4 huevos
Mermelada de arándanos o similar.
PREPARACIÓN
Lo primero que vamos a necesitar es un molde desmontable. Yo usé uno redondo de 26 cm. Cubrimos el fondo con papel de horno para facilitar el desmoldado de la tarta al final.
Picamos las galletas en la trituradora hasta convertirlas en polvo. Si no tenemos trituradora, las metemos en una bolsa de congelar alimentos y pasamos el rodillo hasta molerlas bien.
Ponemos la mantequilla 20 segundos en el microondas para que se funda un poco. Mezclamos las galletas molidas, la mantequilla y la cucharada de azúcar en un cuenco y mezclamos bien con las manos. A la base le podemos añadir también unos frutos secos bien picados, canela o incluso unas galletas tipo oreo. Colocamos la mezcla en el fondo del molde, sobre el papel de horno, y presionamos bien para que se compacte la mezcla, poniendo un reborde de galleta en los laterales un poco más alto, para que nos garantice que no saldrá la mezcla del molde al verterla.
Ponemos la mantequilla 20 segundos en el microondas para que se funda un poco. Mezclamos las galletas molidas, la mantequilla y la cucharada de azúcar en un cuenco y mezclamos bien con las manos. A la base le podemos añadir también unos frutos secos bien picados, canela o incluso unas galletas tipo oreo. Colocamos la mezcla en el fondo del molde, sobre el papel de horno, y presionamos bien para que se compacte la mezcla, poniendo un reborde de galleta en los laterales un poco más alto, para que nos garantice que no saldrá la mezcla del molde al verterla.
Guardamos la mezcla en la nevera mientras preparamos el relleno para que se asiente bien.
Ahora prepararemos el relleno, batiendo el queso de untar con el queso batido, el yogur y el azúcar en un bol.
Añadimos los huevos de uno en uno, el extracto de vainilla, las cucharadas de zumo de limón y la piel rallada del limón y la naranja.
El batido es mejor hacerlo con unas varillas que con la batidora eléctrica, porque si batimos muy fuerte le meteremos demasiado aire a la mezcla y no nos interesa ya que en el horno se nos puede agrietar o se formarán burbujas o subirá demasiado.
Añadimos 3 cucharadas soperas de harina tamizada, mezclamos bien.
Añadimos los huevos de uno en uno, el extracto de vainilla, las cucharadas de zumo de limón y la piel rallada del limón y la naranja.
El batido es mejor hacerlo con unas varillas que con la batidora eléctrica, porque si batimos muy fuerte le meteremos demasiado aire a la mezcla y no nos interesa ya que en el horno se nos puede agrietar o se formarán burbujas o subirá demasiado.
Añadimos 3 cucharadas soperas de harina tamizada, mezclamos bien.
El truco de esta tarta está tanto en el batido como en el horneado, se debe hornear muy lentamente, sin cambios bruscos de temperatura que pueden provocar que la tarta se deforme, agriete o desinfle.
Vertemos la mezcla sobre la masa de galletas que teníamos reservada en la nevera y pasamos al horneado de nuestra New York Cheese Cake.
Con el horno precalentado a 190º, colocamos el molde a altura media, horno sólo abajo y horneamos 10 minutos. A continuación sin abrir el horno, bajamos la temperatura a 150º y horneamos durante 1 hora y cuarto. La tarta tiene que tener apariencia de cuajada por arriba, pero se tiene que mover prácticamente como un flan. Acabamos el horneado, apagando el horno y dejando 15 minutos la tarta dentro con la puerta cerrada. Luego abrimos la puerta del horno y dejamos otros 15 minutos la tarta dentro con la puerta semiabierta. A continuación sacamos la tarta del horno y le pasamos una puntilla por todo el borde para que no se agriete nuestra tarta de queso al enfriarse por haberse quedado pegada al molde.
La dejamos enfriar totalmente para conservarla en la nevera, como mínimo unas 3 horas antes de consumir. Esta es la pinta que tiene recién salida del horno, para mi ya no necesita nada más!
Una vez enfriada del todo, antes de servir, podemos cubrirla con la confitura que más nos guste, en mi caso una mermelada de arándanos salvajes.
TRUCO: Recomiendo guardar la tarta en la nevera dentro del molde toda la noche. Para desmoldar la tarta, quitamos el lateral del molde y levantamos por el papel antiadherente para retirar la base. Si la tarta ha reposado en la nevera toda la noche, podremos quitar el papel fácilmente con dos espátulas de cocina, o incluso apoyándola sobre la base de la mano, mientras lo retiramos con la otra. La tarta tendrá la consistencia suficiente como para no romperse.
Y si la preparáis sin un evento a la vista.. no os preocupéis, podéis congelarla perfectamente y sacarla la mañana antes, estará perfecta para que la lleveis como postre a cualquier celebración!
La dejamos enfriar totalmente para conservarla en la nevera, como mínimo unas 3 horas antes de consumir. Esta es la pinta que tiene recién salida del horno, para mi ya no necesita nada más!
Una vez enfriada del todo, antes de servir, podemos cubrirla con la confitura que más nos guste, en mi caso una mermelada de arándanos salvajes.
TRUCO: Recomiendo guardar la tarta en la nevera dentro del molde toda la noche. Para desmoldar la tarta, quitamos el lateral del molde y levantamos por el papel antiadherente para retirar la base. Si la tarta ha reposado en la nevera toda la noche, podremos quitar el papel fácilmente con dos espátulas de cocina, o incluso apoyándola sobre la base de la mano, mientras lo retiramos con la otra. La tarta tendrá la consistencia suficiente como para no romperse.
Y si la preparáis sin un evento a la vista.. no os preocupéis, podéis congelarla perfectamente y sacarla la mañana antes, estará perfecta para que la lleveis como postre a cualquier celebración!
mmmmm¡qué pinta más rica! La probaremos, seguro. Muy buenos consejos, y un paso a paso muy,muy unteresante
ResponderEliminarsi no pongo queso quark y solo la hago con queso untado, pasa algo?
ResponderEliminarHola! Pues yo creo que no pasa absolutamente nada. Controla las cantidades y la textura, que no quede demasiado espesa la masa, si ves que es así puedes sustituir un poco de queso de untar por su equivalente en yogur y listo!
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