Un supermercado asiático es el paraíso de cualquier amante de la comida internacional. Cada vez que paseo por alguno de ellos me entran unas ganas irrefrenables de comprarlo todo, de preguntar para que se usa esto y aquello, y aunque la mayoría de las veces el tendero no habla una sola palabra de mi idioma, no me importa,... Me fascina la comida asiática, me da igual del país que sea, china, thailandesa, hindú, vietnamita, me gusta todooo...
Imagino que esta variedad gastronómica infinita es una de las consecuencias de la globalización, porque recuerdo hace unos años cuando quería preparar alguna receta que se saliera un poco de lo tradicional, siempre había algún ingrediente no conseguía encontrar, o te lo traía alguien que se fuera de viaje al lugar de donde era autóctono el producto o podías olvidarte..
Pues hoy recordando nuestra última escapada en París, y lo bien que comimos en un restaurante vietnamita en el barrio Le Marais, donde probé los mejores rollitos del mundo, he trasteado por la red para ver si podía reproducirlos... Tan buenos como aquellos no serán, porque no estoy en París, pero me traen bonitos recuerdos a cada mordisco.
Imagino que esta variedad gastronómica infinita es una de las consecuencias de la globalización, porque recuerdo hace unos años cuando quería preparar alguna receta que se saliera un poco de lo tradicional, siempre había algún ingrediente no conseguía encontrar, o te lo traía alguien que se fuera de viaje al lugar de donde era autóctono el producto o podías olvidarte..
Pues hoy recordando nuestra última escapada en París, y lo bien que comimos en un restaurante vietnamita en el barrio Le Marais, donde probé los mejores rollitos del mundo, he trasteado por la red para ver si podía reproducirlos... Tan buenos como aquellos no serán, porque no estoy en París, pero me traen bonitos recuerdos a cada mordisco.
INGREDIENTES
PARA EL RELLENO
1 zanahoria rallada fina
1 cucharada de setas (yo usé setas cultivadas, pero se puede usar shitake o cualquier otra seta china u hongo deshidratado)
1/2 lámina de fideos de arroz (esos que son transparentes).
300 gr de carne picada mixta.
2 ajos picados
1/2 cebolla blanca picada
Sal y pimienta.
1 cucharada de aceite de sésamo (opcional)
1 cucharada de salsa de soja
Cilantro picado o unas hojas de menta o hierbabuena.
Cilantro picado o unas hojas de menta o hierbabuena.
Obleas de papel de arroz
2 yemas de huevo
Aceite de girasol para freir los rollitos
1 hoja de menta (yo usé hierbabuena) por rollito
1 hoja de cogollo de lechuga por rollito
PARA LA SALSA.
2 cucharadas de salsa de pescado
2 cucharadas de azúcar
1 cucharadas de vinagre de vino blanco o vinagre de arroz
1 cucharada de zumo de lima
50 cc de agua caliente
1 cucharada de chili picante (opcional)
1 diente de ajo picado
1 cucharada de chili picante (opcional)
1 diente de ajo picado
PREPARACIÓN
Hervimos los fideos de arroz durante 15 minutos, hasta que estén blandos. Resultan bastante pegajosos así que tenemos que ir con cuidado o acabaremos poniendo la cocina perdida. Los escurrimos y cortamos en trocitos de aproximadamente 1 cm.
Los fideos hervidos antes de cortar...
Mezclamos todos los demás ingredientes para el relleno (excepto las obleas y las yemas..) y dejamos reposar en un cuenco durante un mínimo de dos horas (yo lo dejé toda la noche). Tened en cuenta que yo no tuve que hidratar las setas porque las usé descongeladas, pero si utilizáis cualquier hongo seco tendréis que ponerlo en remojo hasta que se ablanden.
Añadimos los fideos cortados. Como me dió la sensación que con el tiempo de fritura de los rollitos la carne me iba a quedar algo cruda, sofreí el relleno unos minutos, hasta que la carne cambió de color, sin que se hiciera del todo. Luego la dejé templar antes de rellenar los rollitos.
A continuación preparamos las obleas, extendiéndolas sobre la mesa de la cocina. Las podemos mojar con agua tibia o como nos recomiendan en el blog de Pepekitchen, las pintamos con dos yemas de huevo diluidas en dos cucharadas de agua. Les damos la vuelta y repetimos la operación. Conviene no preparar varios rollitos a la vez, sino ir haciéndolos de uno en uno, porque si no se resecan y luego no hay manera de manipular las obleas.
Y freimos en una sartén abundante aceite de girasol caliente.
Servimos inmediatamente, sobre una hoja de lechuga que nos servirá de cubiertos y con una hoja de menta sobre cada rollito.
Los rollitos vietnamitas se sirven originariamente con la salsa Nouc Cham, que se prepara mezclando el agua caliente con el azúcar hasta que se disuelva, añadiendo el vinagre, el jugo de lima, y la salsa de pescado. Añadimos el ajo picado, el chili picante y ajustamos el sabor a nuestro gusto. Conservamos en la nevera hasta servir.
Yo en este caso los preparé con una salsa agridulce que ya tenía de una ocasión anterior que preparé rollitos de primavera tradicionales.
Los rollitos vietnamitas se pueden servir con las obleas crudas, rellenas de verdura fresca, o de langostinos cocidos, aunque fritos resultan más sabrosos.
Yo en este caso los preparé con una salsa agridulce que ya tenía de una ocasión anterior que preparé rollitos de primavera tradicionales.
Los rollitos vietnamitas se pueden servir con las obleas crudas, rellenas de verdura fresca, o de langostinos cocidos, aunque fritos resultan más sabrosos.
Con las cantidades indicadas en la receta nos da para 8 o 9 rollitos.. Los que nos sobren, los guardamos sin freir dentro de un tupper... y al congelador!
A mí también me apasiona la cocina asiática y estos rollitos, tienen que estar muy buenos ¡y qué bien explicado! Gracias!
ResponderEliminarLa cocina asiática es adictiva verdad? No se que tendrá que me vuelve loca..
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