ESCALIVADA CON ATÚN

Y después del atracón de estas Pascuas, no os pide el cuerpo algún platito ligero para depurar el organismo de tanto exceso y comilona familiar? Venga, que se acerca el verano y esta escalivada con atún nos caerá fenomenal para una cena o comida ligera y refrescante. Se trata de una ensalada de verduras asadas muy típica del levante peninsular, y aunque yo la he preparado con pimientos rojos, cebolla y berenjena, admite cualquier verdura de temporada que se nos ocurra, como calabacines, tomate, etc. Completada con unas patatas asadas o huevo duro y atún, nos sirve de plato único para no complicarnos la existencia después de tanta fiesta..

INGREDIENTES PARA 4 personas (y alguna más).

4 berenjenas grandes

4 pimientos rojos para asar

2 cebolla 

2 latas de atún

1 huevo cocido por persona, o unas patatas asadas, (opcional).
Sal, pimienta y aceite de oliva virgen.

PREPARACIÓN 

Precalentamos el horno a 180º. 

Lavamos las verduras y las repartimos en la bandeja del horno. Hacemos un corte longitudinal a las berenjenas. Pelamos la cebolla y la ponemos entera en la bandeja. 

Horneamos una hora y media, volteando las verduras de tanto en tanto, hasta que veamos que los pimientos están arrugaditos y algo tostados. Apagamos el horno y dejamos las verduras dentro media hora más. Luego sacamos la bandeja del horno y dejamos que se enfríen. Una vez tibias las verduras, pelamos los pimientos y quitamos las pepitas. Pelamos las berenjenas y vamos extrayendo tiras finas que iremos colocando en cuencos.  Cortamos la cebolla en tiras muy finas. El líquido de los pimientos no lo tiramos, tendremos los pimientos macerando en él mientras los conservemos en la nevera. Salpimentamos las berenjenas y los pimientos y los regamos con un buen aceite de oliva virgen. Podemos dejar macerar unas horas unos ajitos cortados junto con las verduras, que le darán un gustito muy especial. 

A la hora de servir, cogemos un aro de emplatar y lo ponemos sobre el plato que vamos a usar para servir la escalivada. Ponemos una capa de berenjenas, una de cebolla una de pimientos y otra de berenjenas. Finalmente acabamos con media lata de atún por ración, (o bonito, o una buena ventresca, en función de nuestro presupuesto), y podemos tener preparados unos huevos duros para acabar de dar sustancia a esta ensalada de verduras asadas tan apetecible. 

IDEA. Ya que tenemos que gastar electricidad poniendo el horno en marcha, aprovechamos para hacer bastante cantidad de verduras, ya que se conservan varios días perfectamente en la nevera,  y además podemos hornear unas patatas envueltas en papel de aluminio que quedan la mar de ricas y nos pueden servir para acompañar esta o cualquier otra comida. 

PIMIENTOS ROJOS CONFITADOS (RECETA THX)

Mirad que pinta más espectacular tienen estos pimientos rojos confitados.. Las fotos no le hacen justicia al color que tienen, es una maravilla... Como explicaros,.. la técnica es la misma que para preparar cebolla caramelizada, pero en este caso usamos pimientos... si es que cuando Juana Mari me dice "tienes que probarlo".. me falta tiempo para correr a la cocina porque es garantía de éxito asegurado. Y ya sabeis que aunque en esta ocasión los he preparado con la Thermomix, la receta es adaptable al sistema manual perfectamente, lo único que tendréis que hacer es triturar los pimientos brevemente con una picadora antes de cocinarlos. 

Ya sabeis, si mañana teneis gente a comer a casa, no dudeis en prepararlos para el aperitivo y ya vereis como les encantarán!

INGREDIENTES

400 gr de pimientos rojos

180 gr de azúcar

100 gr de vinagre

50 gr de agua

PREPARACIÓN

Ponemos los pimientos a trozos en el vaso. Troceamos 5 segundos a velocidad 5. Abrimos y bajamos los restos de las paredes del vaso con la espátula. 

Añadimos el azúcar, el vinagre y el agua, y programamos 35 minutos, temperatura Varoma, giro a la izquierda y velocidad cuchara, sin el cubilete. 

Colocamos el cestillo sobre la tapa para permitir la evaporación. 

Transcurrido el tiempo programado, lo podemos envasar como conserva (si dura lo suficiente, porque yo me los podría comer a cucharadas), o servirlo con unas galletas saladas, o biscotes de pan, un poco de queso de untar tipo philadelphia y alguna anchoita (o sin ella). Es un aperitivo que hará las delicias de los invitados..

TORRIJAS DE LECHE

 

Vamos chicos, que estamos en las puertas de las fiestas de Pascua, y no hay Pascua sin unas jugosas torrijas como Dios manda. Lo ideal es prepararlas con el pan especial de torrijas, que tiene una miga más densa que el pan tradicional, casi como de brioche, pero como lo tenía a mano, me he tenido que conformar con una baguette del día anterior (en mi caso del anterior no, del otro, porque con la humedad de la isla no se secó lo suficiente de un día para otro) y no me puedo quejar del resultado porque me han salido unas torrijas de bocado, más bien pequeñitas y quedan la mar de monas, animaros y probad a preparar esta receta, bien barata y requeterica..

INGREDIENTES

1 barra de pan de torrijas o pan del día anterior.

600 ml de leche semidesnatada

La peladura de un limón

1 vaina de canela en rama

100 gr de azúcar

2 cucharadas de canela en polvo

3 huevos camperos

Aceite de oliva suave para freir

Mucho papel de cocina para escurrir

PREPARACIÓN

Lo más importante para hacer unas torrijas con ese toque diferente es infusionar la leche correctamente unas horas antes de la preparación. Ponemos la leche en un cazo, con la peladura del limón (ya sabeis, sólo la parte amarilla, que el blanco amarga), la vaina de canela y calentamos la leche a fuego lento. Añadimos dos cucharadas de azúcar, no más, porque al final les añadiremos suficiente azúcar para endulzarlas. Antes que rompa a hervir la leche, apagamos el fuego y dejamos templar. Una vez templada la leche retiramos las peladuras y la vaina y dejamos que se enfríe del todo. Es importante no preparar las torrijas con la leche caliente porque el pan se nos desharía.

Cortamos el pan en rebanadas de 1 cm, (si teneis previsto prepararlas, podeis cortarlas con el pan fresco y dejar secar hasta el día siguiente y así no os dejareis las muñecas haciendo fuerza con el cuchillo).

Batimos los tres huevos. 

Con el pan cortado, la leche infusionada y los huevos batidos, todo bien preparadito, ponemos a calentar una sartén con abundante aceite y cuando esté bien caliente, vamos bañando el pan en la leche, usamos una espumadera para sacarlos y escurrir el exceso, lo pasamos al huevo, le damos la vuelta para que se impregne bien y lo freimos en la sartén hasta que se empiece a dorar ligeramente. Vamos sacando nuestras torrijas y las pasamos a una fuente con papel de cocina que absorba el exceso de aceite. 

Preparamos un plato con azúcar y dos cucharadas de canela, lo mezclamos bien y una vez templadas las torrijas las rebozamos en el azúcar y ya estarán listas para una merendola espectacular. 

 

IDEA: Si no hay niños entre los comensales, podeis añadirle a la leche medio vasito de vino de Oporto. Yo lo añadí en la última tanda de torrijas que preparé, con algo de miedo a que el sabor fuera muy fuerte y la verdad es que le da un toque especial, así que os lo recomiendo.

MINI CRESPELLS (TRADICIONAL Y THX)

Bueno, lo primero de todo disculparme por la larga ausencia, pero es lo que tiene estar de oposiciones, que uno abandona todas sus obligaciones mundanas, ya sabeis, limpiar, cocinar, escribir en el blog, quedar con los amigos, con la familia..Vamos que os voy a contar, quien más quien menos ha pasado por un período de encierro como el mío. Pero ahora que se acabó todo aquí estamos de nuevo, con energías renovadas y muchas ganas de traeros platitos ricos. 

Hoy vuelvo al ruedo con una receta de la tierra, nuestros tradicionales crespells mallorquines, unas pastas tradicionales de Pascua que hoy en día se encuentran todo el año en cualquier pastelería y panadería de la isla. Yo os presento una versión "reducida" de los tradicionales crespells, reducida en tamaño y en grosor, los preparo más finitos y pequeños que los tradicionales ya que tienen un alto contenido graso y así tranquilizo mi conciencia. A ver que os parecen!!!

 INGREDIENTES

Si preferís preparar los crespells de tamaño tradicional, que son más gruesos, y más grandes, doblad la cantidad de ingredientes. Para los que preparo yo en versión mini con estas cantidades salen unos 35-40 crespells finitos:

280 gr harina de repostería

2 yemas de huevo

120 gr de azúcar glas

100 gr de manteca de cerdo (ya se que no es un ingrediente muy atractivo, pero si no es con manteca de cerdo, no saben igual)

30 ml de zumo de naranja

10 ml de aceite de oliva suave

PREPARACIÓN TRADICIONAL

Calentamos la manteca de cerdo en el microondas hasta que adquiera una textura de pomada, sin que quede líquida del todo. Añadimos el aceite, las yemas y el zumo de naranja y batimos con unas varillas hasta integrarlo todo bien. A continuación añadiremos la harina en tres veces, mezclando lo justo, sin trabajar la masa en exceso. 

Envolvemos la masa en papel film y dejamos reposar una horita para que la manteca se endurezca y la masa sea más manejable. Pasada una media hora enharinamos una superficie de trabajo y extendemos la masa con un rodillo, yo la dejo muy finita... Damos forma con el cortapastas y colocamos los crespells en una bandeja de horno con papel sulfurizado. 

Calentamos el horno a 175º. Horneamos hasta que se empiecen a dorar. Si los crespells no son muy gruesos en 5-7 minutos estarán listos. En cuanto empiecen a tomar color los sacamos del horno y los dejamos enfriar sobre una rejilla. 

 

PREPARACIÓN THERMOMIX

Si no tenemos el azúcar glas preparado lo podemos preparar con la THX (aunque yo personalmente prefiero el que viene ya preparado). Ponemos el azúcar en el vaso y programamos 15 segundos a vel 10. Reservamos. 

Ponemos en el vaso el zumo de naranja, el aceite, la manteca y programamos 1 minuto, 37º, vel 2. Añadimos las yemas y azúcar y mezclamos 30 seg. vel 6.

A continuación incorporamos la harina y programar 30 seg a vel. 6. Amasamos programando 1 minuto, vaso cerrado, velocidad espiga.

Sacar la masa del vaso. Envolvemos la masa en papel film y dejamos reposar una horita para que la manteca se endurezca y la masa sea más manejable. 

Pasada una media hora enharinamos una superficie de trabajo y extendemos la masa con un rodillo, damos forma con el cortapastas y colocamos los crespells en una bandeja de horno con papel sulfurizado. 

Calentamos el horno a 175º. Horneamos hasta que se empiecen a dorar. Si los crespells no son muy gruesos en 5-7 minutos estarán listos. En cuanto empiecen a tomar color los sacamos del horno y los dejamos enfriar sobre una rejilla. 

Consumidos con moderación, sin pensar demasiado en el colesterol ... una delicia.. Espero que os gusten.